DOSIS
Muy oportuno el artículo del periodista Samuel Arango por su crítica oportuna contra quienes quieren hacerle apología a la dosis personal porque la consideran inocua. Olvidan estos señores que un viaje de diez mil leguas empieza con un paso y si no lo creen así, los invito a que lean los testimonios de tantos enfermos anónimos que siguen tratando de superar los infiernos de la drogadicción, la anorexia, el alcoholismo, la glotonería, el tabaquismo y los juegos extremos de azar , entre otros.
El hecho de que yo no le encuentre ningún reparo al consumo en exceso del alcohol, no me habilita para incitar a otros a hacerlo. Me parece una posición inmoral, inmadura e irresponsable.
Atte.
Jairo Tangarife C.
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