POESIAS :LUZO

LUZO
¿Cuántas veces naufrague en sus ojos color miel?
Fui un esclavo de su presencia,
mis sueños nunca deslindaron los límites
De su alcázar corporal.
La brisa que acariciaba su cuerpo,
nunca avanzó mas allá
del espacio de mis pulmones.
Mi mente viajó con Luzo a todos los confines
y yo fui siempre su escudo protector.
Era un sueño bordado en los abismos de mi mente.
Una mañana que la vi,
llevaba un capullo en su vientre.
Desde entonces la nieve habita en mi corazón
LA POLITICA ES EL ARTE DE ANESTESIAR LA ESPERANZA
Su voz en la plaza pública, ha confundido tu hambre.
Tu anestesiado cerebro se ha perdido en una promesa
Más larga que un cuchillo en el vientre de tus hijos
que mueren en el fondo de las ollas cristalinas.
Sientes como pasa avanza el tiempo por tus huesos
que se vuelven ecos hasta la raíz del piso momificado en la esperanza
por el látigo de su lengua almibarada
que forma un circuito en la urna de sus deseos
mientras sigues diluyendo tus ansias en el conformismo.

ECOLOGIA Y FUTURO, DOS CONCEPTOS FUSIONADOS POR LA NATURALEZA Y DISGREGADOS POR EL HOMBRE
Este aire que penetra en mis pulmones
Hasta el fuego del hollín y del polvo letal y químico,
que me vende el progreso por menos años de vida

por segundos de placer del alcohol y el cigarrillo

y del monóxido de carbono que llega hasta mis poros

como una fatiga con sus ruidos multiformes, cálidos y fríos

en la memoria de un cuadro con árboles, flores y ríos

mientras salimos de los laboratorios sintéticos y genios.

GUERRILLEROS

Nacieron como flores sobre las laderas y luces en los socavones

Eran el futuro de los descamisados

l ánima de sus fusiles era la espada justiciera.

Sus ideales, enhiestos como torres iban más allá del infinito.

Pero llegó el invierno de la droga que arrastró

los cuerpos de los inocentes.

Las ánimas ya no fueron de fusiles

Las flores se convirtieron en cruces.

Murieron los ideales y los descamisados.

El cíclope estaba ciego.


DIA DE DIFUNTOS
Desde la puerta del cementerio, observaba el desfile de féretros,
como sombras de diversos tamaños.
Las lagrimas de los feudos
aceleraban el crecimiento del prado.
Las nubes eran las mismas y el viento dormía.
Cruzó una golondrina y un nuevo cortejo.
Las fosas se adornaron de flores.
Los hombres de oro, los papel moneda,
diluyeron sus pasos.
El hombrecillo del vestuario raido
tomó una flor de cada tumba,
oró por los difuntos
y las depositó en la tumba de su amada.
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