NAVIDAD
Allí va él, a paso de muletas, derrochando fortaleza con su abigarrada figura. El cigarrillo pende displicente en sus labios mientras el humo escapa espeso por sus fosas nasales. Sus zapatos tenis muestran el fragor de muchas batallas y sus ropas conservan el olor apolillado de un año de encierro en un viejo baúl. Pasea su segura mirada por el contorno, mientras una leve sonrisa aflora, permitiendo ver una dentadura manchada por la nicotina. ¡Son sus calles de diciembre! El primero de enero, desaparece, dejando entre sus amigos un halo de nostalgia e intriga.
ESTRELLA NEGRA
Desde su canoa de pescador, observaba la estéril lucha del yate contra las olas. La succión esfumó de la superficie de las aguas a todos los náufragos. Descubrió en el vaivén de las olas, un sobreviviente braceando acompasadamente. Una extraña vibración, le hizo abandonarlo a su suerte. Cuando arribó al caserío, escuchó la algarabía de los niños relatando el rescate. El individuo era negro, fuerte y alto como él. Cuando cruzó por su lado, las mutuas miradas signaron el preludio de la tragedia. Fue una noche de luna llena cuando encontró el cadáver de su esposa, torturada y violada. Desde el borde del risco, observó dibujada en el mar la sombra del náufrago, remando lentamente. Cuando salió en su persecución, revisó por última vez, el filo de su machete.
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